hoy es siempre todavía

sábado, 2 de junio de 2012

Un día más de las fuerzas cotidianas




Cuenta Juan Benet en su libro Otoño en Madrid hacia 1950:

“…un par de años más tarde Alberto Machimbarrena y yo fuimos a hacer el servicio militar ordinario, por culpa de nuestras negligencias y a causa también de las pocas simpatías que teníamos por las Milicias Universitarias. Yo me fui con la Infantería a Toledo y él, creo recordar, a un Regimiento de Transmisiones acantonado cerca de Madrid. Durante el período de instrucción, me explicaron en la teórica lo que es la patria. El sargento dijo: “Hoy os voy a explicar lo que es la patria. Con las manos enlazadas a la espalda dio una vuelta al corro de reclutas sentados en el suelo, nos miró con furia y tras elevar los ojos al cielo para solicitar inspiración, dijo: la Patria es nuestra Madre”. Parece ser que la teoría en el regimiento de Alberto era un tanto diferente. Ante idéntica situación su sargento preguntó a varios reclutas qué pensaban acerca de la patria y como no le satisfacieran las respuestas, dijo: “Os lo voy a explicar de una vez para siempre. ¿A que cuando veis a un francés os da rabia? ¿Sí? Pues eso es la Patria”. Y también por aquellos años, Caneja terminaba de resumir nuestras amargas consideraciones con una definición propia, sugerida al cruzar por delante del portalón de una Casa-Cuartel de la Guardia Civil: “Patria es todo lo que no se puede defender con las armas”.





Pienso en ello mientras cuentan en televisión sobre la celebración de no sé qué actos relacionados con el oficio de las armas, donde se exalta en discursos el principio de Patria, sin saber muy bien a estas alturas si sigue siendo el mismo de aquella época que Juan Benet recuerda. Y ya que se empeñan, uno se ve obligado a preguntar si el tema de la Patria tendrá que ver también con la corrupción de los próximos al poder, la defensa de los grandes negocios auspiciados por una banca ladrona y por otras fuerzas vivas arrimadas a las viejas prácticas del negocio concedido delictivamente entre las familias de arriba, con el modus vivendi de ciertos entes trasnochados que presumen de ser el fiel de la balanza institucional o simplemente con el mantenimiento de ciertas castas.

Con una economía al borde de la quiebra no es descabellado sugerirles que se dejen de zarandajas y de gastos superfluos sobre celebraciones. ¿Por qué no preguntar a los mineros asturianos y leoneses sobre su idea de patria? ¿O a los obreros que se van a la calle por los EREs de sus empresas? ¿O a los miles de jóvenes parados o con contratos menos que basura? ¿O a los profesionales de la Enseñanza que ven mermados sus medios y aumentados sus esfuerzos en deterioro de la calidad educativa? Etcétera. Tal vez Caneja tuviera razón. Las armas no defienden la vida cotidiana de la gente. Porque el enemigo de esta está casi siempre dentro de casa. Y se le deja hacer. Hoy es un día más de las fuerzas y el esfuerzo cotidiano de los de abajo. Simplemente.





* Las ilustraciones son obra de Joaquín Aragón Vega.




9 comentarios:

  1. Apreciado don Juan Mairena, Otoño en Madrid hacia 1950 es un espléndido libro y me alegra ver que todavía hay quien se acuerda de él.

    El concepto de patria deberia ser como el de la fe: íntimo, inexplicable e intransferible. Un sentimiento vago que no puede ser discutido ni impuesto.

    No puede ser algo que nos trasciende porque de allí sale el engaño: hacernos creer que los intereses de la banca, por ejemplo, son nuestros intereses y debemos defenderlos.

    El Estadp ejerce su poder con las armas y con el dinero, es decir, con la ostentación de las dos cosas. Pero eso ocurre porque los ciudadanos nos hemos desinteresado por la política. El Estado somos nosotros, pero parece que lo hemos olvidado.

    Las patrias sólo son cortinas de humos.

    Me alegro de saludarlo.

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  2. Enric. Bienvenido por estos pagos. Ciertamente, aún hay tipos raros que hojean-otean-orean textos de los que pocos se acuerdan. Ya ves, frente a tanta novedad, algunos abrevamos en aquello pendiente u olvidado. Al comentarme lo que me comentas me has librado de cierto complejo y a la vez alguien me proporciona una alegría sobre lecturas pasadas (no tan antiguas como en este libro de Benet, el difícil)

    ¿El concepto de patria? A estas alturas me resulta como hablar del sexo de los ángeles. Además desde que alguien de la antropología me citó una vez el concepto matria, me pasé a él (con reservas también obviamente) Lo que habría que señalar es que semejante y confuso concepto no ha pasado nunca de ser un término demagógico y clientelista, sospecho. Término presto a airearse cuando las cosas no le van bien al grupo de poder de turno o a alguna o todas de sus castas patrimonialistas, ya me entiendes. Aquí, en los USA y en el rincón más agreste del planeta.

    Esa misma identificación reduccionista: todo lo español -por ejemplo- es digno de ser defendido es una falacia. Que nos dejen de historias gibraltareñas, que hay más habitantes españoles en UK que gibraltareños (andaluces al fin) en el Peñón. Es un concepto sumamente débil en estos tiempos de mezclas e intereses cruzados. Así que, como para asumir los intereses bancarios como propios de un currito común de hipoteca y/o paro.

    Rubrico tu último párrafo. Pero matizo: ¿alguna vez tuvieron -tuvimos- claro los ciudadanos esa misma condición, la de ciudadanos (cives)? Mientras no se supere la espina de súbditos que aún llevamos clavadita no alcanzaremos ese nivel a través del que, entonces sí, podremos exigir al Estado que se porte no como instrumento de castas minoritarias.

    Pero ya ves, todavía se realizan rituales en nombre de las patrias.

    Gracias por comentar. Paséate por aquí cuando gustes.

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  3. Una tristeza que lleguemos a esta situación, donde todos lo verdaderos valores se han perdido u olvidado.
    y tanto pensamiento sólo para exclavizar al más pobre.

    Yo digo lo mismo, que se dejen de zarandajas y arrelgen nuestra patria,mejor dicho, nuestroa país, nuestra tierra,aunque todos necesitamos lecciones y conciencia.
    un abrazo.

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  4. Mariola. El tema es que los que gestionan o administran o se apoderan o se apropian, ya no sabe uno, son reflejo de lo que anhela o prescinde la colectividad. Tengo dudas sobre pedir que arreglen a los que están para lograr sus propios fines espúreos y pretender que el país funcione como ellos desean.

    Tiene que cambiar antes la ciudadanía.

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  5. Algún día escucharemos ,algún día veremos y nada podremos hacer si no reconocemos.


    pero de momento nadie se desvela.

    Un abrazo

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  6. Extraño país este, Genetticca, donde los desvelados callan y los ciegos nos dirigen.

    Un abrazo.

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  7. en la historia, muchos patriotas, tantos patrioteros
    ¿de qué patria hablan, cuando la empeñan con empréstitos impagables?
    ¿de qué patria hablan, cuando privatizan las industrias y servicios erigidas con las manos y los dineros del Pueblo?
    ¿de qué patria hablan, cuando poniéndole un casco azul a los soldados para someter otros pueblos, y luego someterlos para reconstruirlos o quitarles sus bienes minerales o petrolíferos?
    .
    La verdadera concepción de Patria, está identificada en aquello que te extremece al verle, ya altiva y majestuosa, ya oprimida y sojuzgada,
    por eso me siento tan patriota español, como griego, como uruguayo, como peruano, junto con los trabajadores patriota e internacionalista
    .
    un abrazo

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  8. Me alegra saber de ti de nuevo, Omar. Ando estos días un poco parado. Entre todo lo que acontece en Europa (y lo del fútbol es una cortina) y la actitud del gobierno de ineptos y mentirosos, a más de encubridores de ladrones, que tenemos estoy poco comunicativo.

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  9. Gracias, Omar, por tu declaración de principios. Pero estamos siendo anulados, en manos de quienes nos azuzan unos contra otros. La pobreza va a instalarse en zonas de Europa si no se cambia el rumbo y se baja la presión chantajista. Los de abajo estamos acomplejados y reducidos. ¿Hay algo más que palabras bienintencionadas? ¿Son posibles hechos y nuevas experiencias que nos eleven?

    Un abrazo.

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