hoy es siempre todavía

martes, 26 de abril de 2011

Cuando la Justicia hace honor a su nombre

(Imagen de Manuel Boix, http://www.manuelboix.com/)


Dos alegrías que da la Justicia en pocas fechas. Que el Derecho existe todavía, aunque sea en sus términos siempre relativos, no me hace lanzar las campanas al vuelo.  Antigua como es esta disciplina, admito su compleja y ardua evolución de acuerdo con las demás facetas de la cultura social y política de la humanidad. A través de un camino lleno de piedras, espinas y alambres electrificados. Es decir, de todo tipo de obstáculos frente a los poderes, que o no han deseado la Justicia, o la pretenden controlar o simplemente reducirla en sus competencias. Para más inri, los agentes responsables de impartirla y decidir en alta instancia no siempre están a la altura de lo que los deseos de justicia y clarificación de los ciudadanos exigen. Ni siempre se comportan en su papel, sin dejarse interferir por otros poderes y por ideologías.




Y es que los caminos de impartir justicia son intrincados. Ojala no sean tan inextricables, como a veces parecen. Pero de vez en cuando,  casos sonoros te hacen creer un poquito. Por una parte un caso que topa con la Iglesia, como dice el refrán. El Tribunal Constitucional ha dictado reciente sentencia amparando a una profesora de religión que hace diez años fue expulsada de la enseñanza concertada por el episcopado, por el tremendo delito de casarse por lo civil con un separado. Diez años de lucha judicial por parte de esa mujer llamada Resurrección Galera, cuyo nombre se llena de connotaciones esperanzadoras. ¿Resurrección de la Justicia? Algo es algo. Sólo falta que la resurrección se produzca también en el poder Ejecutivo, donde reside la pelota. Pero el asunto es que la Iglesia, que tanto predica de boquilla el amor y la justicia entre los seres humanos, se cree al margen de las humanas leyes de un Estado de Derecho. Ella se creó en su momento su propio Derecho (el Canónico) y aún pretende deambular con él por una sociedad variada ideológicamente, sin acatar normas, costumbres y legislaciones que nos obligan a los demás.

Mientras se mantenga un concordato del Estado con el Vaticano, la propiedad laica y libre de un Estado como el español es falsa. Que la Iglesia permanezca cerril, egoísta y poco propensa a admitir que su reino es de este mundo mucho más que otros (en el fondo de sus resistencias sigue estando el dinero, la propiedad, el control y la influencia, sin los cuales elementos no serían nada)  no es nada nuevo. Pero que no haya manera de que dispongamos de un Gobierno que corte sus compromisos históricos y nefastos con un organismo religioso al que se le concede aportaciones presupuestarias directas y otras concesiones indirectas, en grado abundante, sigue siendo una deuda pendiente con la propia sociedad.



(Imagen de Xue Jiye)


El otro tema es el de la injuria. Cierto señor llamado Miguel Ángel Rodríguez, el ínclito portavoz de Aznar cuando éste gobernó, ha sido condenado a una multa por delito continuado de injurias graves con publicidad. Este personaje se permitió insultar al Doctor Montes (aquel médico madrileño que sufrió el acoso del consejero de sanidad de la comunidad de Madrid bajo la égida de Esperanza Aguirre) llamándole nazi. "El que decide matar a alguien es un nazi", dijo en su día, desfigurando el delicado y sensible trabajo de cuidados paliativos que el doctor Montes llevaba a cabo en el hospital con los pacientes más desesperados.






Lo curioso de esta nueva sentencia no es tanto la condena al personaje como la amonestación, no sé si muy severa pero al menos que genera precedente, a las cadenas Telecinco y TVE, por aceptar este tipo de insultos, provocaciones y falta de respeto en sus tertulias. Acaso sirva de ejemplo y las telebasuras (ya no hay donde elegir) elijan mejor a sus invitados. Claro, ya se sabe. Si la gente pide bazofia, hay que darle bazofia, como dijo no sé quién en cierta ocasión. Yo creo que no. Que lo que la ciudadanía está demandando es más verdad, más información, más debate, más clarificación. Pero sospecho que ninguna televisión (y si hay alguna excepción pido disculpas) quiere mojarse. Money is money, y la ética me la encontré en la calle.


17 comentarios:

  1. Lo peor es que la ética no la encontraron (tampoco en la calle) y, aunque ya iba siendo hora de que hiciaran "alguna" cosa justa los jueces, mucho se lo pensaron...porque estos dos casos ya son de hace años. Curiosamente, la enseñanza de la religión, la pagamos todos (aunque la iglesia designe a quien nombra) y la TVE, también, aunque contrate a un sinvergüenza.

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  2. Cuánto me alegro de que por fin funciones, aunque sea un poquito.

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  3. La ética anda tirada por la calle, Maríajesús, es obvio, ¿no? Porque la ciudadanía la ha perdido y no sé hasta qué punto quiere reencontrarse con ella. Lo de la Iglesia siempre se llamó "Moral católica", que me parece un eufemismo, o acaso sean términos antitéticos: una institución mercantil-de poder en todas las instancias posibles-de control social y secuestro de las mentes humanas difícilmente puede ser moral. Pero ya se sabe que ese ente ha reiventado la Historia y cada 500 años corrige algún postulado, cuando ya no está en uso, y la Moral tiene que ser su Moral, porque otros planteamientos no les sirven y ser liberales es fuego y condena eterna.

    Es evidente que hay mucho pendiente por resolver sobre la interferencia de la Iglesia en la sociedad plural.

    Un abrazo.

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  4. Sí, SdadDiletante, de vez en cuando algún juez logra interpretar la Ley y en este caso nada menos que el altísimo tribunal. Pero la duda está ahí: ¿servirá para algo? ¿Acatará el Episcopado la sentencia?

    Que cunda el precedente y sigan dándose más pasitos. Por otra parte, enhorabuena a quienes luchan ardua y tenazmente por defender sus derechos humanos frente a quienes les persiguen (Resurrección Galera versus Tu es Petrus, en este caso)

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  5. Mucho me temo que ésta es la excepción que avala la norma, porque la semana pasada ha sido precisamente la caverna jurídica la encargada de hacer el ridículo internacional - una vez más - dando la razón a la Delegación de Gobierno de Madrid sobre la famosa procesión atea con el argumento tan "sólido" como que podía generar desórdenes públicos. También los generan las celebraciones del triunfo en una final de una copa de fútbol, y no se suspende ésta. No contentos con eso, han admitido a trámite una querella contra los convocantes por ofensas a la libertad de religión ¿? Para rematar han vuelto a suspender en sus funciones a Garzón cuando ya estaba suspendido, para dar al ciudadano "confianza en la Administración de la Justicia", algo que ya hemos perdido hace años por su empeño en hacer las cosas al revés. En fin, que una de cal y cien de arena. Un juez de un caso de corrupción masiva encausado y los corruptos presentándose a las elecciones para seguir mangoneando, y encima en plan chulo. ¡Sí señor, con dos cojones!

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  6. Mientras el poder ejecutivo y el judicial no se separen (no olvidemos que los magistrados del Supremo y del Constitucional son nombrados por su afinidad a los partidos políticos en un número proporcional), encontraremos éstos disparates que comenta Carlos Galeón. Yo como valenciana los sufro directamente.
    Respecto a la Iglesia, eso ya es otro cantar. Como decía D. Quijote a Sancho :" Con la iglesia hemos dado, Sancho" capítulo IX, II parte. Y aunque originariamente la sentencia no tuviera esas connotaciones con las que hoy la conocemos, la Iglesia siempre ha sido intocable y ningún gobierno se atreverá a hacerlo. Se mueven muchos hilos detrás que ignoramos.

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  7. Sí, Carlos, te doy la razón. La Justicia, al menos en los temas públicos y de resonancia e interés general, parece un cúmulo de contradicciones, dondedijedigodigoDiego, un pasito palante y otros dos patrás,lo que un juez ve de una manera otro lo ve opuesto, no se sabe ya si las leyes son las mismas para todos los intérpretes o qué demonios pasa.

    Simplemente quería ver el lado positivo de algunas sentencias (quiero pensar que haya más) pero la Judicatura no está manteniendo el tipo del papel que en el Estado debe cumplir. Es una sensación que tenemos la ciudadanía sencilla.

    Abrazo.

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  8. CMG. Es que los valencianos batís el record de la desesperanza judicial. La larga mano de los políticos que tú sabes, de su corte de abogados, jueces y demás, dificulta enormemente el procesamiento de la corrupción. Y mira que es importante.

    Respecto a la Santamadre...hombre, de acuerdo con lo que ya Cervantes tenía claro. Pero tampoco son de otra materia, ¿o sí? No podemos permenecer con las manos quietas ante sus ansias de poder permanentes, ¡a nuestras expensas!

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  9. Con Rouco a la cabeza y dándole el pábulo que se le está dando no nos salimos de esta. La sociedad y la justicia tienen un trabajo ingente, desmesurado, casi imposible de llevar a cabo, para desmantelar tantos siglos de represión y adoctrinamiento religioso.
    Salud
    Francesc Cornadó

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  10. Juan, te doy la bienvenida como seguidor de mi blog. Compartimos el placer por la literatura.
    Salud
    Francesc Cornadó

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  11. Pues todo el trabajo que la sociedad quiera asumir. Es el precio de la Libertad.

    Gracias, Francesc, no desesperar-se.

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  12. Mi amigo Juan, en todas las casas se cuesen habas.
    La justicia, Poder Independiente, depende del dictado de leyes de otro poder y del presupuesto de "aún" otro poder. ¿La separación de poderes?
    Me siento, igual que tu, un hombre que escala el Everest, cada adelanto cuenta, como en estos dos casos. Pero tengo mucha sed y mucho apetito de Justicia!
    Seamos libres nosotros en nuestro fuero íntimo, de manera de estar en mejores condiciones de velar por la libertad en general.
    Te mando un gran abrazo desde Uruguay, recordándote que disfruto de tu literatura en grado sumo.

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  13. Amigo trasoceánico. Creo que el hambre y sed de justicia es universal. Los mecanismos para que ésta no se lleve a efecto son más burdos en unos Estados y más sofisticados en otros. Hay varas diferentes de medir, según clases, asuntos e intereses. Y, sin embargo, sigo creyendo en la necesidad de profundizar en la separación de los poderes, en el perfeccionamientos de los sistemas de enjuiciamiento.

    Esto no sólo no invalida, sino que apoya y es paralelo a nuestra búsqueda de Libertad interior. Pero ojo, que ésta, sospecho, no es posible si la otra no se instala de manera más obvia y satisfactoria en nuestras sociedades.

    Un abrazo.

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  14. si se puede decir q si pero es ubn juego!!

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  15. Disculpa, Anónimo, no te capto muy bien la expresión.

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